El MQ25 es el drone de Boeing diseñado para realizar repostajes en vuelo con el mínimo riesgo posible. En estos últimos días se han realizado varios test que han resultado en un hito nunca antes conseguido: el primer repostaje en vuelo de forma automática.
El avión que también formó parte de esta hazaña es un Boeing F/A-18 Super Hornet de la Marina de los Estados Unidos. La misión principal del MQ25 es poder aumentar el alcance de combate de los aviones.
En particular, los aviones que podrán repostar de forma automática en vuelo usando este dron son el Boeing F/A-18 Super Hornet, el EA-18G y el F-35C.
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En la parte inicial de la prueba del primer repostaje automático, ambos aviones volaron en formación uno cerca del otro. Esto se realiza para garantizar que la maniobra se realiza de forma estable. La distancia entre ellos era muy pequeña, de tan solo 10 metros.
Aunque no se conoce con exactitud los datos de altitud y velocidad, se estima que estas pruebas suelen realizarse a velocidad y altura moderadas. Aproximadamente se realizan a una altitud de 18000 pies y una velocidad de 250 nudos.
También se realizan sobre zonas despobladas, por si surgiera algún problema que obligase a detener la prueba o se produjese algún percance entre ambos aviones.
Este primer repostaje automático entre dos aviones se ha realizado tras 25 vuelos de pruebas. En esos vuelos se probó la aerodinámica del MQ25 así como se simuló diferentes configuraciones de reabastecimiento en vuelo.
Una vez terminadas las pruebas en vuelo, el dron continuará sus pruebas a bordo de los portaviones de la Marina.
Otras pruebas superadas por este avión automático consisten en vuelos de más de 6 horas sin parar a treinta mil pies de altitud.