La antena VHF de un avión se usa para varios propósitos, entre ellos la comunicación y la navegación aérea. Al igual que en el resto de sistemas de los aviones se estudia todo, en este caso se comprueba que la situación de las antenas VHF es la correcta y su recepción excelente.
Pero… ¿cómo se prueba una antena VHF si un avión está constantemente en movimiento? Elementos del propio avión como depósitos de combustible o misiles pueden interferir en como la antena recibe las ondas de radio.
En el centro de investigación de Newport (Nueva York), se encargan de estudiar donde hay que colocar las antenas de un avión para que su eficiencia sea máxima.
El campo de pruebas de Newport está compuesto por 8 zonas las cuales están situadas en varias colinas diferentes, cada una dedicada a una prueba específica.
En cada campo de pruebas, el avión se monta en un pedestal en una posición que dependerá qué antena se va a probar.
La medición de los patrones de radiación se realiza enviando a las antenas haces de ondas con la frecuencia a estudiar. Entonces, se va girando o inclinando a los aviones mientras se recogen datos de los patrones, amplitudes y fases de las ondas recibidas.
Los datos recibidos permiten elaborar un mapa 3D con una precisión de 0.00254 cm a más de 9 metros de distancia. Con ese mapa 3D, los investigadores concluyen cual es el lugar exacto donde han de colocar la antena VHF en la aeronave.
Hay muchos beneficios asociados a este tipo de instalación. En concreto, estas pruebas se realizan con un coste muy inferior al que supondría hacerlo en vuelo.
¿Qué imagináis que es más fácil: probar una antena en un avión moviéndose y agitándose en el aire o en un avión que se puede girar e inclinar a voluntad y que por supuesto no tiene los motores encendidos con el gasto de combustible que eso conlleva?
Además, estas pruebas se pueden repetir con una precisión muy elevada que permiten comparar, evaluar y realizar cambios y modificaciones en los sistemas afectados.
El centro cuenta con sus propias instalaciones para poder fabricar los elementos que necesiten para la investigación y pruebas. Los elementos allí fabricados pueden ser soportes de antenas, secciones de estructura (fuselaje, alas o secciones de cola) así como réplicas de armamento, pedestales y tanques de combustible.
Los aviones cuyas antenas se prueban en el centro de investigación de Newport son mayormente militares, aunque los resultados de las pruebas se aplican también a aviones civiles. Algunas de las aeronaves que pasan por las manos de los investigadores de Newport son:
- A-10
- F-16
- F-15
- F-18
- F-22
- F-35
- MH60 Seahawk
- B-1B y KC-135 (Secciones de fuselaje).
Éste es el uso real de esta instalación. No os dejéis engañar por un bulo que circula por la red que dice que el propósito de la instalación es recuperar las monedas sueltas que se le caen a los pilotos dentro del avión 😉. Aunque es un bulo original obviamente no es cierto.
Si algún lector tiene dudas sobre comunicaciones aéreas, desde TMAS Aviación os remitimos al twitter de los controladores aéreos que seguro estarán encantados de resolverla.